Desciende por una cuerda, superando arbustos, ríos o cualquier dificultad que encontremos bajo nuestros pies.
En la Tirolina descendemos mediante unas poleas por una cuerda tensa, anclada entre dos puntos alejados a una distancia y altura determinada, obteniendo una diagonal que nos proporcionará la sensación de deslizarnos por el aire.
Disfruta al máximo de una actividad adaptada para vuestro recreo.